Cuando emprendemos, es algo que muchas personas han pasado, cuando trabajas como empleado de tu cliente o un aliado o un aliado suele tergiversarse esta función.
¿Eres empleado o eres proveedor?
Es ahí el tema, y lo más común que puedes encontrar es que, muchas veces, el mismo emprendedor se puede convertir en su propio verdugo, perdiendo coherencia.
A veces, por el miedo de perder a ese cliente, se termina, aceptando muchas cosas que no están contempladas en la propuesta inicial, y es algo que se tiene que dejar claro, de forma asertiva..
Porque ellos también tienen clientes y por tal motivo, tampoco permitirían que sus mismos clientes soliciten más cosas de lo ya pactado.
Ahora bien, si este no accede así sea de manera asertiva, lamentablemente estás ante un caso de clientes que ven a sus proveedores como empleados.
En lugar de ver a un profesional externo que es dueño de su tiempo y que solo está para cumplir con lo pautado y dar resultados.
Y sí, puede que se lleguen a enojar, y es por un problema que muchas personas arrastran desde la infancia
El cual es no aceptar LÍMITES, así sea empleado, hay límites que tienen que respetar.
Así como en su momento ellos exigen el mismo respeto.
Por eso hoy quiero que tomes en cuenta, si eres emprendedor y tienes un aliado o cliente que te carga de actividades no contempladas por un mismo costo, y es que lo converses.
Ahora bien, si ese accede es porque simplemente no tiene la capacidad económica para más, o no está dispuesto a pagar más, así te perjudiques.
Ahora bien, esto es un mensaje para ti emprendedor, que a su vez también eres un cliente, créeme que TODOS quisiéramos hacer las cosas por un costo menor, así el proceso sé muy engorroso o sea muy óptimo.
Pero toma en cuenta que todo, todo tiene un costo y este es menor, es porque realmente la calidad no será la misma,
Soy abogada, que todo tiene que estar en su justa medida, ni más ni menos, que toda propuesta tiene que estar bien sustentada y valorada.
Porque a veces por querer GANAR, terminamos perjudicando a otros y aprovecharnos de esa necesidad, que se callan, pero en un momento, eso va a afectar la producción en el caso de que seas un cliente.
Porque seamos honestos, ninguna persona, trabaja sin el justo valor remunerado, sea empleado, emprendedor, dueño de negocio, empresario.
¿Se dan cuenta de que todo es un ciclo? Exactamente, porque hasta un empresario de alto nivel es un cliente de otra empresa, por eso nadie puede decir que desconoce ese sentimiento.
Hay empresas donde tienen clientes que no comprenden que los proveedores, no son sus empleados,
Que si bien deben cumplir con las expectativas, también hay límites y un precio ajustado a lo que requieren, que deben pagar.
Nadie está exento y al final de cuentas, es solo empatía, y reconocer que todos necesitamos de todos, y que a su vez se necesita valorar, el trabajo que se hace con amo, pero con el precio justo.
Además, respetando los limites y derechos de cada quien en la forma de trabajar.
Recuerda que se puede dialogar y lograr que las partes estén de acuerdo, porque todos conocen ese sentir al emprender y sobre todo de pasar de empleado a emprendedor.
Atte. Leydy Cervantes